
Capitán América: Un Nuevo Mundo llegó a los cines con la promesa de revitalizar uno de los pilares del Universo Cinematográfico de Marvel. Sin embargo, la película ha terminado dejando más dudas que certezas, siendo catalogada por muchos como una de las entregas más flojas de la saga.

Desde su narrativa hasta su ejecución visual, el filme parece perder el rumbo en varios aspectos. La historia, que intentaba ofrecer una nueva perspectiva sobre los conflictos globales y el legado del Capitán América, se siente forzada y carente de impacto emocional. Los personajes, en lugar de mostrar profundidad y evolución, parecen atrapados en diálogos repetitivos y situaciones poco convincentes.
El protagonista, aunque carismático, se enfrenta a un guion que no logra aprovechar su potencial, mientras que los villanos carecen de motivaciones claras y terminan siendo antagonistas olvidables. Incluso las escenas de acción, tradicionalmente uno de los puntos fuertes de las películas de Marvel, carecen de la espectacularidad y tensión que los fans esperan.

Visualmente, la película tampoco logra destacar. Los efectos especiales resultan desiguales, con algunas secuencias que parecen sacadas de una producción menor, y la banda sonora pasa desapercibida, sin aportar el dramatismo necesario a los momentos clave.
En definitiva, Capitán América: Un Nuevo Mundo se percibe como una oportunidad perdida. Aunque intenta explorar nuevos caminos dentro del UCM, la ejecución queda lejos de las expectativas. Para muchos, esta entrega representa un paso en falso en la franquicia y deja la duda sobre cuál será el futuro del icónico héroe en el cine.
“Y LO MEJOR QUE TIENE LA PELICULA EN EL CINE ES QUE SE TERMINA XD, NO YA EN SERIO ES UN DESASTRE”