El esperado Dragon Quest III HD-2D Remake es mucho más que una simple actualización gráfica. Con el inconfundible estilo HD-2D que Square Enix popularizó en su momento, este remake revitaliza uno de los JRPG más icónicos de todos los tiempos, ofreciendo tanto a veteranos como a nuevos jugadores una experiencia inmersiva y visualmente impresionante.
El juego mantiene la esencia de la entrega original de 1988 y se han agregado mejoras significativas como escenas adicionales que exploran la historia del padre del héroe, y una mayor profundización en la mitología de Erdrick, el legendario héroe de la saga. Estas inclusiones enriquecen una narrativa que, si bien sencilla, sigue cautivando por su encanto clásico.
JUGABILIDAD Y ESTETICA
Entre las novedades destaca la clase Monster Wrangler, que permite capturar monstruos y utilizarlos tanto para el combate como en las arenas de monstruos, un elemento que añade variedad estratégica y un extra de diversión. También se han incorporado funciones modernas como combate acelerado, guardado automático y marcadores de objetivos opcionales, ideales para quienes prefieren un ritmo más fluido y accesible. Asimismo, se ofrecen tres niveles de dificultad, desde una experiencia relajada hasta desafíos para los más hardcore.
A pesar de estas mejoras, el juego conserva características tradicionales como los encuentros aleatorios y el sistema de progreso basado en recompensas según avancemos en el juego, lo que podría desanimar a quienes no disfruten de estas mecánicas clásicas. No obstante, para muchos, estas particularidades son parte del encanto nostálgico del título.
IMPRESIONATE TECNICAMENTE
El apartado visual es uno de los mayores atractivos del remake. Los paisajes combinan pixel art con ambientes tridimensionales, logrando que cada ciudad, mazmorra y pradera cobre vida de manera espectacular. Los efectos de iluminación y las animaciones dinámicas añaden profundidad, mientras que la banda sonora regrabada mezcla nostalgia con frescura, logrando un equilibrio perfecto.
Aunque algunos jugadores podrían desear personajes más desarrollados o una narrativa más compleja, el enfoque del juego en la aventura y la exploración sigue siendo su mayor fortaleza. Dragon Quest III HD-2D Remake es un testimonio del legado de esta franquicia y una invitación para que nuevas generaciones descubran por qué este clásico definió el género JRPG.
Con su mezcla de modernidad y tradición, este remake demuestra que los grandes juegos pueden trascender generaciones, siempre y cuando se traten con el respeto y la pasión que Square Enix ha demostrado aquí. Una experiencia imperdible tanto para nostálgicos como para curiosos del género.
CONCLUSION
Dragon Quest III HD-2D Remake logra un balance entre modernización y fidelidad al original, siendo un referente de cómo hacer justicia a un clásico. Aunque no perfecto, es un tributo conmovedor a un juego que marcó historia en los videojuegos.
NOTA FINAL : 9/10
Por: Yugo